SISTEMA DE VIDA... EN DESARROLLO

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Un sistema socio económico, que fomenta la formación estructurada de individuos, incentivando a que todos puedan optar al titulo más alto de todos… pero quien se preocupa, del ciudadano, los valores, los sentimientos y el desarrollo psico-social.

En mi paso por el sistema, no es primera vez que enfrento al gran dilema, comerte las ganas de hacer lo que quieres y pensar con altura de mira, optar por lo más conveniente, para avanzar dentro de un sistema que apunta a logros, reflejados en materialismo, quien premia mi decencias, quien mide mi cultura, quien condice con mi espíritu, quien se asocia a mi causa.

Tienes las herramientas para tocar el cielo y cambiar el mundo, tienes las ganas de hacer cosas, tienes salud y apoyo de tus seres queridos, eres el portador de una visión única de la vida… de tu vida.

Elegir que quieres vivir, como vivirlo… confiando en que todo saldrá bien tarde o temprano, pero dando gracias por tener la libertad de elegir.

Comenzar el viaje más caro de todos, donde las agencias no llegan, el viaje con cupos limitados, donde solo hay un pase… para tí, “El viaje desde tí y hacia tí…con sus innumerables escalas y duración indeterminada”. Conocerte para saber que necesitas, en realidad, que eres y de que vives… te alimenta un cartón donde estampado con letras doradas se encuentra tu nombre y titulo, ó, te alimenta sentir de otros decir que, ¡Eres una gran persona!

Atento a los devora hombres, buscan matar al ser en esencia y conservar su envase, relleno con estructurados algoritmos, orientados al triunfo, sobre todas las cosas…

Si no eres exitoso, ¡No Existes!,
Si no tienes como demostrarlo, es porque no lo tienes,
… si te sientes exitoso, no basta… ¡No existes!

Muero por el éxito, y cuando lo alcanzo… vivo en él y por él.

Tengo títulos, dentro de cajas, que se llenan de polvo… pero cuelgo en grandes muros con orgullo mis pensamientos… seguro que eso es lo que soy, lo que vale… con defectos y virtudes, sigo en el camino de la vida, en una carrera sin un titulo definitivo… optando a todos por “Honoris Causa”, de manos de quienes han compartido conmigo.

Cargo mi mochila con lo necesario para hoy, lápiz, cuaderno, música y muchas ganas de caminar entre la gente, buscando aquellos que reconozco con solo mirarlos a los ojos…

Compre los pasajes hace mucho tiempo, el viaje esta lleno de matices, incluso he olvidado, que es lo que busco, pero… en cada esquina encuentro grandes letreros, que marcan mi camino y sigo hacia tí.
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RETORNO

Solo por ese paraje, donde los rayos suaves del sol entran con dificultad entre las tupidas hojas de esos grandes seres del bosque, ellos que cobijan la vida y la facilitan… el viento lucha por entrar a recoger el oxigeno emanado de sus poros, a su vez ellos reclaman ansiosos el carbono que sale de mis pulmones.

Hermosa exposición plantada en esta galería abierta, los colores de las hojas, los renuevos, otras maduras, algunas secas, contrastan al fondo sublime del infinito follaje… seres varios se mueven por el piso o juegan entre las copas mas altas, cantando repetitivas tonadas de misterioso significado…

Perdido en un mundo desconocido, sin miedo, siento que es aquí donde pertenezco, se levanta la tapa de la jaula y no me atrevo… sin embargo, lo deseo… examino con cautela salgo me arriesgo…

¡Que puede ser peor a este encierro!

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VIAJAR EN TREN

VIAJAR EN TREN…. Viajar en tren, ES DE LO MEJOR… es de lo mejor, SE TIRA EL CORDEL… se tira el cordel, Y SE DETIENE EL TREN… jajajaja!!!!!!!

El entusiasmo se dejaba sentir entre quienes participamos, en tan esperada expedición, prontos a abordar el carro dos, en el anden principal.

¡Que mañana emocionante!

Nuestro primer viaje en tren y todos queríamos, un pase especial a la cabina del conductor, veríamos como era dirigir una culebra de fierro tan grande, el “patas de fierro” le llamaba mi papá.

Contaba él, que en su juventud, los viajes en tren eran comunes, hoy en día la gente cambio este medio de movilización, por el bus o el auto particular. La curiosidad es incontrolable, que abra al mirar por las ventanas de un tren, será mágico como cuentan, un viaje placido, con hermosos paisajes por una vía, remontada entre cerros, cruzando ríos y corriendo por la orilla del mar… en un caballo rodante.

La canción no la dejamos de cantar, desde que papá nos mostró los boletos y ahora la repito en mi cabeza casi de puras ansías…

VIAJAR EN TREN…. Viajar en tren, ES DE LO MEJOR… es de lo mejor…

Con cámara en mano registro todo esto, me llama mucho la atención la formalidad de la gente que nos atiende, es casi como una ceremonia, en la estación no existe el ruido de los motores… es como si el tiempo se hubiere congelado bajo este galpón gigante.

Tomamos asiento los cuatro, podemos mirarnos unos a otros, es un detalle muy cómodo, la vía se aleja de la ciudad pasando entre unas plantaciones y comienza nuestra travesía alejados de la típica visión de la carretera y sus anuncios… esto va muy rápido. Mi hermano menor no alcanza a nombrar lo que vio y ya aparece algo nuevo que le llama la atención… el resto de la gente parece que ya había viajado anteriormente, pues creo que, no le ven la gracia.

Papá charla con un señor de los boletos, el cual nos dice, entrando a la zona del próximo poblado debemos bajar la velocidad, entonces pueden ir a la cabina del maquinista, yo les indicare cuando pasar. - ¡Bien! –

VIAJAR EN TREN…. Viajar en tren, ES DE LO MEJOR… es de lo mejor…Ahora si canto yo también, el resto de la gente nos mira y sonríen.

Es la señal… nos indican donde pasar y nos recibe el conductor del tren, que sin mirar el camino nos habla, nosotros parándonos en puntillas tratamos de observar los controles. Era una cabina de mando muy grande llena de luces, botones y palancas, cuando papá nos tomo en brazos pudimos ver lo maravilloso de la vista, como en el "juego de carreras" del pc.

Encantados dimos las gracias y nos comenzamos a retirar de la cabina, cuando se sintió un golpe que nos hizo perder el equilibrio, gire a mirar… solo vi algo rojo, parecia jalea o yogurt, que estaban en el vidrio… y el maquinista diciendo - ¡sáquenlos de aquí! -

Papá se asusto muchísimo, yo creo que pensó también que, por suerte no fue otro tren… - nos sentamos -.

Mamá emocionada pregunto, como les fue y papá dijo bien. Comencé a contarle como era y mostrarle las fotos, pero ella pregunto que pasaba porque estábamos tan raros…

-Nada… todo esta bien, fue genial verdad – dijo papá.

¡Si… y casi chocamos! - dije interrumpiendo. Su mirada se clavo en mí, como cuando digo que comemos helado antes de almorzar…

No paso nada, si solo fue alguien que lanzo un tomate, algún niño maldadoso de por aquí, afirmo papá, riendo y colocando su mano sobre mi cabeza.

También yo reí muchísimo, imaginando la broma del niño que lanzo el tomatazo, dándole justo a la ventana del conductor.

Continúe exponiéndole las fotos a mamá… pero ella bruscamente, me quito de enfrente, cuando mi hermano dijo:

– YO VI LOS OJOS DEL TOMATE Y SUS LENTES PEGADOS AL VIDRIO –
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BATALLA NOCTURNA

Una tripa vacía sobre el escritorio, el tubo del bolígrafo ya se encontraba dentro del cesto de la basura, una gran maraña de papeles, hojas en blanco otras garabateadas, algunas impresas y muchas de ellas arrugadas, conformaban los restos del sangriento campo de batalla, escena en la cual se había enfrascado esa noche, la madrugada era el horario propicio… todo aquel que supiera disfrutar de la soledad y rescatar, de ella, la voz interior.

Muchos como él, disfrutan de estas prácticas acompañados por humo de cigarrillo, taza de café, un refresco o chocolates. Algunos aducen estar ajenos al cuerpo, sufrir una especie de trance, sin conocer del hambre, la sed, el cansancio, la excitación, el frío… solo están ahí en su nave… viajando a mundos únicos, disfrutando de su diferencia con el resto de la gente.

- ¡Nos reconocemos con solo mirarnos a los ojos!

Sigilosamente se levanta de su sillón, camina… guardando el sueño de los que descansan, siente su respiración, sus quejumbrosos cambios de posición y afuera los perros ladran a la noche… contando que están ahí, atentos percibiendo más de lo evidente.

“El músculo duerme, la ambición descansa”, recuerdo esa frase… de niño mi abuelo, aficionado al tango solía escuchar a Gardel y votar una lagrima, por la muerte de su pequeña hija, cuando relataba algo sobre “mecer la cuna vacía”.

Salgo afuera sin antes mirar el reloj, ya son las 01:30hrs, miércoles… mañana hay que trabajar… aún así, la noche me pide a gritos tomar, un poco más de lo que ofrece.

Salgo al antejardín, encuentro su rostro vigilante, un manto azul profundo cubre su espalda y un pañuelo de seda blanco se cuelga en su cuello, la luz de un lucero cerca de su redonda cara sonriente, que dice…

¡Aún no puedes descansar sin ver mi rostro!

Y espero jamás encontrar descanso, si dejara de adorarte…